Antes de nada es importante aclarar que todo diente sano debe tener sensibilidad. Es decir, cuando el diente está sano, la pulpa , también conocida como “nervio dental”, está vital y por lo tanto responde ante estímulos muy fríos o muy calientes. Al final, es uno de los primeros sistemas de defensa del organismo.
El problema surge cuando existe una hipersensibilidad dental. Esta condición limita bastante la vida normal. Ya que en esta circunstancia cualquier alimento /bebida algo frío nos resulta desagradable.
¿Qué factores influyen en la hipersensibilidad dental?
- Retracción de encías. Cuándo hay una retracción de encías, y por lo tanto, queda expuesta la raíz dental, es muy probable que aparezca una hipersensibilidad dental ya que la raíz no tiene esmalte para protegerla y lo hace mucho más sensible a los cambios térmicos
- Si padecemos bruxismo, es decir, si rechinamos los dientes, vamos a desgastar el diente, bien sea a nivel incisal (desgastando el esmalte) o nivel gingival, (desgastando la raíz) haciendo más sensible el diente.
- Malformaciones del esmalte. Cuando hay amelogénesis imperfecta del esmalte es más fácil que aparezca hipersensibilidad dental.
¿Qué tratamientos se pueden llevar a cabo?
Como en toda patología o enfermedad lo más importante para realizar un correcto tratamiento es diagnosticar el origen de la misma. Por eso, cada caso es distinto y hay que analizarlo. Pero la buena noticia, es que hay tratamiento para todas ellas. Los tratamientos son:
- Injerto de encía en caso de retracción
- Férula de descarga tipo Michigan en caso de bruxismo. Esto evita que progresen las lesiones. Pero en estos casos puede ser también necesario tratar las lesiones existentes como por ejemplo mediante restauraciones con resina compuesta
- Eliminación de las zonas afectadas por la amelogénesis y restauración mediante resinas compuestas o cerámica , dependiendo de la extensión de la misma
- Uso de pastas dentífricas y colutorios específicos para la hipersensibilidad dental
Así que, una vez más, lo más importante es la prevención. No olvides venir a vernos cada 6 meses y dejarnos ayudarte a sonreír más. Si quieres saber más sobre los factores que afectan a tu sensibilidad dental visita nuestra clínica dental en Madrid Centro, Llerandi&Béjar ¡Te esperamos!